El Centro General de Madres, Padres y Apoderados (CGMPA) del Liceo 7, José Toribio Medina de Ñuñoa, ha presentado una denuncia formal ante el Consejo Nacional de Televisión (CNTV) en contra de Canal 13. El motivo de la denuncia radica en la emisión de la nota titulada «Violentas acciones de encapuchados en Liceo 7 de Ñuñoa» durante el noticiario Teletrece Edición Central, el 20 de octubre. Este reportaje incurre en una violación de la dignidad de los estudiantes y en la falta de cumplimiento de la ética periodística, según lo establecido en la normativa chilena y los principios de información veraz y oportuna.
Vulneración de la Dignidad Humana y los Derechos Fundamentales
La nota emitida por Canal 13 criminaliza de manera injustificada a la comunidad estudiantil del Liceo 7, presentando imágenes y hechos descontextualizados, algunos de los cuales datan de 2023, sin aclarar su procedencia ni contexto actual. Esta manipulación no solo afecta la percepción pública de los estudiantes, sino que vulnera gravemente su dignidad, exponiéndolos a un trato degradante y estigmatizante. La narrativa creada por ciertos medios no escatima en dañar la imagen y la moral de toda una comunidad escolar. La Constitución chilena garantiza el derecho a recibir información veraz y equilibrada, un principio que fue completamente ignorado en este reportaje.
Además, el CGMPA denuncia que Canal 13 no respetó el derecho a réplica de los principales actores involucrados, ya que en ningún momento se consultó a organizaciones representativas como el CGMPA ni al Centro de Estudiantes del Liceo (CEL7). Estas omisiones constituyen una violación de los derechos fundamentales a la información y a la representación justa en los medios.
Información Sesgada y Manipulada
El reportaje también incluyó declaraciones anónimas y sin respaldo de un supuesto apoderado que realizó graves acusaciones sin ofrecer pruebas, contribuyendo a una narrativa de criminalización que combina hechos de manera confusa e irresponsable. Además, esta estigmatización mediática alimenta la polarización política, permitiendo que sectores reaccionarios utilicen la inseguridad como herramienta de control social. Los intentos de vincular de forma generalizada a nuestros estudiantes con grupos violentos no solo son mezquinos, sino que ignoran las verdaderas causas del descontento juvenil: la exclusión, la marginalización y la falta de oportunidades en un sistema que los ha dejado de lado. La nota omitió mencionar el trabajo multiestamental que se ha realizado dentro del Liceo 7 para mejorar la convivencia escolar y abordar las problemáticas que enfrentan los estudiantes.
Este tipo de cobertura periodística no solo distorsiona la realidad, sino que genera un daño irreparable en la imagen y el bienestar de los estudiantes y de toda la comunidad educativa, ya que refuerza una percepción negativa que no se ajusta a los hechos.
Contexto y Responsabilidad de los Medios de Comunicación
Este incidente de manipulación mediática no es un hecho aislado. Recientemente, los medios de comunicación han sido criticados por su manejo irresponsable de situaciones similares, como los graves incidentes en el Instituto Nacional Barros Arana (INBA), donde la cobertura mediática se ha centrado más en criminalizar a los estudiantes que en examinar las causas profundas de la violencia escolar. Estos casos, sumados a la tensión política en el país de cara a las elecciones municipales, sugieren un posible uso de la desinformación para fines políticos, lo cual agrava aún más el impacto social de esta clase de cobertura. La prensa debe asumir su responsabilidad ética en la construcción de un relato más equilibrado y veraz. Es urgente que se detenga la práctica de utilizar la desinformación como herramienta de control social y político. Es fundamental que los medios de comunicación asuman su responsabilidad ética y no utilicen la violencia escolar como herramienta para promover agendas políticas o aumentar audiencias, pues esto afecta directamente la salud mental y el bienestar de los jóvenes, quienes ya enfrentan una serie de desafíos como resultado de la precarización de la vida cotidiana y la crisis de salud mental post-pandemia.
Solicitud de Rectificación Pública
El Centro de Madres, Padres y Apoderados y el Centro de Estudiantes Persistir del Liceo 7, José Toribio Medina, de Ñuñoa, solicitan que el Consejo Nacional de Televisión investigue a fondo esta denuncia y exija a Canal 13 realizar una rectificación pública y que otorgue un espacio en su noticiero central para que las partes afectadas, incluyendo el CGMPA y el CEL7, puedan entregar su versión de los hechos ante la opinión pública. Esto es crucial para restaurar la dignidad de los estudiantes y garantizar que la ciudadanía reciba información justa y equilibrada.
Nuestro Compromiso, tanto desde el Centro de Madres, Padres y Apoderados como desde el Centro de Estudiantes
Como representantes de la comunidad educativa del Liceo 7, nos comprometemos a seguir trabajando por un ambiente educativo que promueva la convivencia, la participación y el respeto mutuo. Creemos firmemente que la violencia escolar no se resolverá a través de la criminalización o la represión, sino mediante un enfoque que valore a cada estudiante como sujeto de derechos y agente de cambio, y que priorice el bienestar emocional y mental de los estudiantes, ofreciendo espacios de diálogo y apoyo.
La crisis que atraviesa la educación chilena, en particular la educación pública, es compleja y multifactorial, y debe ser tratada con responsabilidad y seriedad por parte de los medios de comunicación, las autoridades y la sociedad en su conjunto. Solo mediante la colaboración y el entendimiento podremos construir comunidades educativas que promuevan la paz y el respeto mutuo.
Centro de Madres, Padres y Apoderados Liceo 7, José Toribio Medina, de Ñuñoa
Centro de Estudiantes Persistir Liceo 7, José Toribio Medina, de Ñuñoa
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