La entrada en vigor de la norma se traduce en un incremento de hasta Bs 1.000 en las pensiones de los jubilados bolivianos.
El presidente Luis Arce promulgó este martes las modificaciones a la Ley de Pensiones, tras una espera de un año debido a obstáculos en la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP), lo que permitirá un incremento en las pensiones de los jubilados bolivianos de hasta Bs 1.000.
«A partir de hoy, nuestros hermanos trabajadores que se jubilen y quienes ya están jubilados ganarán mil bolivianos adicionales», afirmó el mandatario en el acto especial que contó con la participación de jubilados y afiliados a la Central Obrera Boliviana (COB), en la Casa Grande del Pueblo.
Las modificaciones a la ley incrementan los límites solidarios, ajustando el monto de pensión según los años de aportes. Se establece un límite inferior de Bs 720 para quienes aportaron al sistema por 10 años, y se eleva el límite superior de Bs 4.200 a Bs 5.200 para quienes han contribuido durante 35 años. Esto se traduce en un aumento de hasta Bs 1.000 en las pensiones.
Arce explicó que la norma no solo contempla el incremento del límite superior en la escala de pensiones, sino también el aumento del aporte patronal solidario. Para garantizar el financiamiento del sistema de pensiones y este aumento, el aporte patronal solidario se incrementará en un 0,5%, pasando del 3% al 3,5%.
Asimismo, el aporte solidario minero del empleador subirá del 2% al 2,3%, y el aporte nacional solidario de los trabajadores con ingresos superiores a Bs 13.000, que anteriormente se encontraba en una escala de entre 1,5% y 10%, será ajustado a una nueva escala del 1,15%, 5,74% y 11,48%. Estos cambios buscan garantizar la sostenibilidad de las pensiones para los jubilados bolivianos.
Por otro lado, el presidente recordó los desafíos que enfrentó la aprobación de esta ley, que trae importantes beneficios para los jubilados. Lamentó que algunos sectores, especialmente el gremio médico, se opusieran, junto con legisladores de la derecha, a la aprobación del artículo que establecía los 65 años como la edad máxima para acceder a la jubilación, una demanda de la Central Obrera Boliviana (COB).
«Tuvimos que ceder para asegurar la aprobación de la ley, priorizando el bien mayor, que es beneficiar a todos los trabajadores que hoy reciben estos beneficios», explicó.
El Sistema Integral de Pensiones actualmente cuenta con más de 152.000 afiliados que se benefician de la fracción solidaria. «Era necesario velar por ese bien mayor, y el Gobierno tomó la decisión en las negociaciones dentro de la Cámara de Diputados, permitiendo viabilizar y aprobar el incremento de las pensiones para todos los trabajadores», concluyó el mandatario.